Mariposa

- La vida ha cambiado un poco, nunca me he quejado de mi vida, pero tampoco nunca le he agradecido, creo que lo tendría que hacer, después de todo no es mala... hay vidas peores, muchas, muy peores que nos damos cuentas, pero cuando vemos esas vida somo ciegos, ciegos algo así como recién nacidos... miras por mirar, sin saber que pasa... sin saber quienes son ellos. -Eso es lo normal de las mayorías de las personas que yo conozco, hay excepciones, pero muy pocas casi ninguna, diría yo.-
Hoy leí a una amiga virtual... extraño, pero fue bueno, interesante, mas cuestionamientos, pero se sacará algo bueno el fin de semana, será interesante descubrir cada significado.

Conociendo una mariposa... gastando pensamientos recordándola, viéndola de re ojos, observando flácidamente su forma de actuar, su forma de mirar y tratando de entender su forma de pensar. Tratar de tocarla a escondidas... sin que nadie me vea, pedir un beso..., quizás con brillo, sin que mi mariposa vuele y se pose en otra flor que no sea mía.
Unos ojos que me cautivan... me miran y no puedo dejarlos de mirar, labios que deseo , palabras que se esconden detrás del esplendor de sus ojos.. una interrogante que algún día la descubriré, tarde ó temprano, o puede que sea una historia inconclusa. Se que en algún momento explotara todo esto y no se en que quedara, tampoco se cuando será, quizás hoy como quizás sea mañana o mas aun... nunca estalle.

Contemplando el mar... mirando sus infinitas olas... sus infinitas formas, sus diversas gotas.... sus diversos colores, sus diverso pensamientos y porque no sus diversos amores y desamores que allí han muerto, en eso el me vio y me pregunto...
Mar dijo: "Que haces aquí viejo amigo, amigo de ese invierno que me visitaste, de ese primer invierno en que me pensaste visitar en aquella playa negra"?
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Dije: "hemos venido hasta aquí, fue un acuerdo mutuo... a los dos tu nos das calma, esa tranquilidad que no encontramos en ningún otro lugar... te acompañamos, mientras nosotros tratamos de ver que podemos hacer con este amor larvado que al menos yo siento.
El me respondió arrojándome una gota de mar en la palma de mi mano, fue leve, pero me di cuenta que no hablaba solo...
luego seguí contemplando el fin del mar, observando aquella mariposa posada a mi lado subjetivizando el horizonte y logrando un momento en mil consigo misma.